Biographie
Jose conoce el Kin-Jo-Do desde sus inicios, hace más de veinte años, y nos cuenta que desde entonces hasta hoy siempre que lo practica, lo primero que siente es esa pacífica felicidad que define a este arte y que, según él, es la base sobre la que se va construyendo todo lo demás. Afirma que a partir de esta alegre serenidad, la persona según vaya adquiriendo la maestría en los movimientos (katas), entrará en el descubrimiento de su verdadera dimensión y de la vida, y que no es otra cosa que conectar con lo sagrado. Nos dice que se suele tener una idea de lo sagrado, bastante alejada de lo que en realidad es. Con el Kin-Jo-Do, a medida que vamos evolucionando en su práctica, tomamos consciencia de que este sentimiento de lo sagrado es algo muy sencillo y natural, que está al alcance de cualquiera, porque se trata simplemente de lo que sentimos al entrar en contacto con la paz, la alegría, la felicidad, la belleza, el amor… en fin todo lo bueno y maravilloso que nos ofrece la vida, que es con lo que conectamos al realizar los movimientos del Kin-Jo-Do. Y por último termina diciendo que al ir avanzando en su conocimiento y maestria del Kin-Jo-Do nos permite evolucionar desde nuestro ser interno. Es decir que le da a nuestra alma la posibilidad de alcanzar su propósito de luz. Por eso para él, comprometerse a trasmitir esta maravillosa disciplina es lo mismo que su compromiso con la vida.